Cuando la patria empezaba,
hubo solo una herramienta
que le dio luz de esperanza
en aquel tiempo difícil
que por ella se peleaba,
por salvar del invasor
el destino de una raza.
Porque desde el norte entraban,
los que querían tomarla,
sin pensar que nuestros criollos
pa’ defenderla esperaban.
Montaban caballos criollos,
que en esta tierra se criaran,
descendientes d'esos primeros
que a nuestras pampas llegaban.
A la par de tantos criollos
con ropas ensangrentadas,
quedaban sus osamentas
esparcidas y olvidadas.
Y nunca quiso la historia
que esa sangre tan valiente
fuera bien reivindicada
“El caballo en la batalla”.
Mientras por estos lugares,
tanta tierra de esperanza,
latía su corazón
como un cultrun y esperaba.
Los antiguos, hombres sabios,
en nguillatun la cuidaban,
porque siempre fue la mapu
que de su raza heredaran.
Corridos de otros países,
por guerras
y hambre llegaban,
colonos a Buenos Aires,
con mentiras en promesas
y a esta tierra inmigraban.
Buscaron tal vez la zona,
parecida a aquella infancia,
la que a travez de los mares
les quedara sepultada.
Y fue este Valle el lugar,
de familias Alemanas,
Libaneses, Españolas,
de Judías e Italianas.
Había que establecerse,
el Río Negro invitaba,
y les iba bendiciendo
la tierra pa’ trabajarla.
Sus herramientas tan bien,
por sus brazos aguardaba,
y el corazón de la tierra,
en latidos se alegraba.
Fue entonces ese el momento,
que aquella luz de esperanza,
se volvía realidad,
el hombre la transformaba.
Pero hubo otra presencia,
que en silencio caminaba,
tirando de aquel arado
que a esta tierra roturaba.
Era.., el mismo de siempre,
el que luchó en las batallas,
aquel que dejó sus huesos
esparcidos por la patria.
El que llevó a San Martín,
a libertar otras patrias.
El que acompañó por siempre
los destinos de la raza.
El que escribió con su sangre
la historia que lo olvidara.
Allí estuvo en el silencio,
sin pedirles nunca nada,
a los que escriben la historia,
de formación de la patria.
Por eso estamos acá,
por su esfuerzo su templanza,
por que lo ataron al yugo
para que este valle nazca,
Porque fue el primer transporte,
que llevó a una embarazada,
para que sea mas grande
la familia que aquí estaba.
Porque siempre puso el lomo,
desde que el mundo fue mundo,
transformadora herramienta
donde su cuerpo habitaba.
Por todo lo que nos diste,
que nos das y nos darás,
este mi humilde homenaje,
por que SOS fundamental,
Y en los hijos de mis hijos
tus hijos existirán.
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